jueves, 8 de agosto de 2013

Kathy Salosny y su vida en Mega: "Acá me necesitaban"

La ex figura de TVN habla de sus primeros meses al mando del matinal “Mucho gusto”, de cómo se dio su cambio de canal y de su, en general, intenso 2013 y repunte en la pantalla chica criolla.

Kathy Salosny está feliz. Su llegada a Mega y al matinal “Mucho gusto” han sido más que buenas y de todo eso y su intenso último tiempo es que habla con Terra.cl.

¿Cómo han sido estos tres meses animando “Mucho gusto”?
-Tengo la sensación de haber estado aquí mucho tiempo más, porque lo he pasado muy bien. Tengo un equipo espectacular con el que hay un fiato muy rico, hay afectos y agradezco que existe también la posibilidad de participar en términos creativos. Además, con Lucho Jara hay un tema aparte, ya que hemos tenido un fiato que no siempre se da… y eso ha sido muy notorio. Con su sentido del humor y su trayectoria, nos llevamos perfecto, junto con que somos de generaciones parecidas, entonces tenemos un montón de engranajes los dos que hace que cada uno con sus recursos nos permitan hacer un muy buen trabajo juntos.

O sea, estás en tu salsa…
-Sí, me levanto todos los días feliz a las cinco y medio de la mañana. Estoy motivada, llego con entusiasmo a la “pega” y eso es un lujo, aunque es lo que debiera ser siempre… pero no siempre pasa.

En el último tiempo, ¿no te pasaba mucho eso en televisión?
-Lo que pasa es que no estaba en un franjeado, no estaba en un matinal, más bien estaba haciendo algunos formatos en televisión, pero también se entiende que así es la cosa. La televisión hoy es distinta, no hay franjeados, están los programas de farándula o los matinales y por cierto fue súper adecuada esta oferta, porque es donde a uno más le gusta despegarse.

Se dice que los principales rostros de cada canal están en los matinales.
-Eso dicen (ríe).

¿Y tú sientes que eso es así?
-Yo siento que acá me necesitaban, se hizo la apuesta, logramos una excelente salida, hicimos las cosas bien y acá estoy complementando un producto que ya tiene su sello, que tiene su público ganado, y uno viene a sumar.

¿Qué pasó contigo cuando se comunicaron de Mega para que estuvieras en el matinal?
-Bueno, lo primero que yo dije “es que tengo contrato vigente con TVN, pero conversemos igual”… ahí nos juntamos a conversar y me dijeron “hagamos las cosas bien, intentémoslo, ¿te gustaría?”, y yo dije “por supuesto que sí”. Y me fui con toda la honestidad del mundo a hablar con mi jefe directo, que era Mauro Valdés (director ejecutivo de TVN). Se lo expliqué y él entendió que yo no quería rechazar la oferta y que me diera las facilidades para hacerlo… y ahí primó el sentido común y la buena voluntad. Pasamos por todo el proceso pertinente, pues nadie quería romper el fairplay acá y logramos una muy buena salida, un muy buen acuerdo.

Eso no se da mucho considerando que te podrían haber dicho que te vas a la competencia y que serías una rival para el “Buenos días a todos”, por lo que podrían haberte dicho que no.
-Sí, pero todo fue un proceso también, no de un día para otro. Desde luego que el canal debió haber tomado sus consideraciones, pero finalmente se tradujo en lo que logramos.

¿Y te motivó inmediatamente la propuesta o lo pensaste mucho?
-No, no lo pensé. Fue súper atractiva la oferta; cuando les dije que tenía contrato vigente con TVN, ellos me dijeron que conversáramos igual, entonces yo pensé “¡ah!, esto va en serio”. Me encontraba de vacaciones y partí a Santiago a una reunión, conversamos y se dio.

¿Qué ha sido lo mejor de estar en “Mucho gusto”?
-Todo lo que te mencioné, la buena onda, la participación en la génesis de las ideas, el día a día. Igual es una “pega” difícil esta, la de estar todos los días en un programa de cuatro horas y cuarto no es menor. Yo ya lo sabía y tenía la experiencia, pero acá vengo a un equipo nuevo, un canal distinto… pero al final es como lo mismo. Y la competencia está ruda, es décima a décima la cosa, lo que también me parece justo, pues todos ponemos la misma energía y se invierte de la misma manera, ya que al final cada matinal tendrá su sello, pero es todo más o menos parecido. Eso sí, yo hago una diferencia, y es que siento que el “Mucho gusto” tiene más del cincuenta por ciento en el estudio, pasamos mucho por el estudio y no metemos tanto envasado ni pegoteo de notas, entonces creo que eso tiene un valor. Cuando más se queda la gente es cuando estamos en conexión con el servicio social, ya sea con ginecólogo, temas de salud mental, los móviles y la denuncia ciudadana. Eso tiene mucha repercusión en la gente.

¿Hay algo que se te haga más difícil estando en el matinal?
-No, al contrario, tal vez por eso es que estoy tan contenta. Hay una tensión permanente, pero es porque hay que estar bien lúcida para un programa largo. Sin embargo, me gusta porque es una adrenalina rica de sentir todos los días.

LA NUEVA CARTA FUERTE DE MEGA… “ESO NO ES GRATUITO”
Actualmente eres el rostro femenino más fuerte de Mega, las que tenía ya no siguieron, como Javiera Contador o Vivi Kreutzberger. ¿Cómo tomas eso?
-Me encantaría que hubieran más mujeres en pantalla en todas partes y que hubiese una equidad en ese sentido. Siempre los hombres tienen un espacio más protagónico, pero yo me siento muy contenta de estar acá. Porque se valora la experiencia y un montón de cosas que para el canal eran necesarias tenerlas en su pantalla y una pantalla tan importante como es el “Mucho gusto”. Hoy los matinales son como el soporte de todos los canales, porque claro… no hay más franjeados, así que me siento contenta de que pensaran en mí y que pusieran sus votos en mi persona.

Pensaron en ti, pudiendo haber confiado en alguien de adentro. En ese sentido se evaluó de manera importante tu figura…
-Sí, pero eso no es gratuito. Ellos ven estudios y no es algo al azar.

La gente como que te echaba de menos en las mañanas y la gente rechazó tu salida del “Buenos días a todos” en su momento. ¿Sentías que había un público que quería verte en ese horario?
-A mí me molesta volver una vez más al tema del “Buenos días a todos” porque esa es una etapa pasada.

¿Pero sentías que te echaba de menos la gente en las mañanas?
-Siento que me he ido ganando un espacio en el inconsciente colectivo. Uno está desde el año 1984 y siento ese apoyo y una responsabilidad respecto a eso. Y claro, siento que hay gente que se sumó al programa obviamente y me hago responsable también para ejercer lo mejor posible mi rol social... y siento ese cariño. De verdad lo siento, lo veo en las redes sociales, en la calle y qué mejor para uno que trabaja en un escenario de comunicación, como también puede ser el teatro o la radio. Eso es lo que uno busca, una identificación con lo que tú propones, opinas o porque les caes bien. Me siento súper agradecida de eso... y la gente deposita confianza en mí y eso es algo que no se pide, sino que se regala y a mí las personas me regalaron su confianza.

En base a esto último, ¿sientes que te merecías llegar al “Mucho gusto”?
-Si estoy acá es porque las cosas tenían que ser así. Si las cosas se dieron de la manera que sucedió, es por algo. También creo en las sincronías de la vida, que justo se fuera la Javiera y que me quedara poco para salir de TVN.

¿Estarás ciento por ciento en “Mucho gusto” o hay posibilidades de hacer otras cosas en el canal?
-No lo sé aún, por supuesto que estoy disponible, pero por el momento lo que tengo es el matinal, que ya es harto.

Incluso tuviste que dejar la radio.
-Sí, lo hice para tener un poco más de vida, para hacer deporte, porque a más tardar a las diez y media ya estoy durmiendo.

¿La vida nocturna ya no existe?
-No, en la semana no. A lo más me puedo desordenar un día y llegar a las once, pero no más que eso, sin embargo, no sabes cómo me la cobra el cuerpo al día siguiente.

“SI UNO ESTÁ CONTRATADO, QUIERE TRABAJAR”
¿Cómo fue el año pasado para ti en TV? Considerando que estuviste casi sin pantalla en TVN. Sólo hiciste “Perdidos en la tribu”, algo parecido a lo que le pasó a Ignacio Franzani y Carolina de Moras también…
-Por lo que te decía antes, esto es distinto ahora.  Los matinales son los franjeados… y la farándula. El resto son los formatos y para que los formatos los saques al aire requiere un tiempo de análisis de focus, para grabarlo, etcétera. Pero pasa siempre y hay varios rostros que hoy no están en pantalla.

¿Sientes que hoy existe menos espacio para los rostros en TV?
-Es lo que te estoy diciendo, creo que el mejor espacio para el día a día son los matinales, el resto son formatos. Ahora siento que todos los formatos que hice en TVN, como “Esta es mi familia” o “Perdidos en la tribu”, eran bastante coherentes a lo que uno ha proyectado en este medio, que es más bien la conexión con la gente.

¿Y te hubiese gustado tener más protagonismo en TVN?
-No voy a decir si es lo que me hubiese gustado o no. Por supuesto que si uno está contratado, quiere trabajar, pero también entiendo la realidad de cómo es la televisión.

¿Nunca llegaste a los ejecutivos a decirle que querías hacer algún proyecto o tener más pantalla en TVN?
-No. Había que esperar no más y punto.

¿Y sentías que venía algo mejor para ti?
-No, solamente confié. Hay que confiar un poco en la vida. Lo que pasa es que yo no tengo todos los huevos en una misma canasta y a mí no se me acaba la vida con la “tele”. A los treinta años renuncié a la “tele” porque quería estudiar teatro… y está la radio, hice teleseries, hice mi vino, he sido docente, tengo tantas otras formas de desplegarme como la actriz o la comunicadora que soy que no tengo esos temores. A TVN llegué por casualidad a la “tele” nuevamente.

¿Mantienes un cariño por TVN a pesar de no haber tenido pantalla en el último tiempo?
-No, si no es a pesar de nada, yo mantengo un gran cariño por TVN pues gran parte de mi carrera la hice allí, en los noventa y ahora en esta vuelta. Igual hice muchas cosas en ese canal.

Y volviendo a lo anterior, es decir, si algo pasa con la televisión y llegas a salir, no se te iría la vida…
-No, en absoluto, no tengo esa ansiedad y tal vez por eso siguen llegando las oportunidades. Cuando uno se saca las obsesiones respecto a alguna cosa, la vida te compensa de otra manera.

DEBUT EN CINE Y BUENA VIDA PERSONAL
¿Tienes algún otro proyecto fuera de “Mucho gusto”?
-Mi vino está ahí, hay que comprarlo… y no quedan muchos. ¡No! Es broma, hice 1.500 botellas y no voy a hacer más tampoco. Es un vino que hay que tenerlo para el que lo quiera y ojalá lo guarde, pues en unos años más va a ser una joyita. Aparte, voy a hacer cine con Alberto Fuguet, mi primera película, pero no te puedo contar nada más que eso, sino Alberto me va a sacar de la película. No quiere que cuente nada, sólo te puedo decir que estar trabajando bajo la pluma y dirección de Fuguet es espectacular. Ya hicimos una parte, ya partí. Es algo nuevo para mí y sigo agradeciendo a la vida que me siga mandando cosas nuevas. Y respecto al teatro siempre hay nuevas posibilidades.

Y las teleseries, ¿no hay posibilidad de volver a estar en ese género?
-Por ahora no me interesa estar en alguna, no sé lo que pueda pasar mañana. Pero las teleseries implican mucho tiempo y no me daría el cuero.

A nivel personal, ¿sigues sola o existe alguien por ahí?
-Sigo como sigo siempre y lo paso bien en la vida, pero eso ya pertenece a mi mundo privado. Estoy súper tranquila y contenta.

Por último, ¿cómo definirías este 2013 en tu vida?
-La vida me sigue sorprendiendo y gratamente.


FUENTE:

No hay comentarios:

Publicar un comentario